- Un cumpleaños con todas las de la ley, sumado al cariño de sus vecinos y amiguitos que la acompañaron en su gran día y por supuesto la complicidad de los uniformados.
Lo tradicional para una madre, es celebrarle el cumpleaños a sus hijos desde el primer año de edad, costumbre que prevalece, muy a pesar de que en ocasiones dicen “este año no le voy a hacer fiesta” pero finalmente, terminan haciéndola.
Y es que para nadie es un secreto, que las mamás, solo necesitan saber el muñeco o la caricatura favorita de su hijo para poner a volar su imaginación y comenzar a armar toda la logística que requiere este tipo de organizaciones.
Pero, que pasa con aquellas madres que por más que imaginen o sueñen en darle un cumpleaños ideal a sus hijos y más cuando son pequeños, ¿no puedan hacerlo?
María Castro es una madre soltera de 27 años, está desempleada y vive con sus dos hijos de 4 y 5 años; la menor, Cecilia Mercado, cumplió recientemente sus 4 añitos, y para esta pequeña su cumpleaños lo es todo, pues le gustan los globos, las decoraciones, las tortas y el momento en que todos al unísono cantan el cumpleaños feliz.
¿Pero quien o quienes, podrían hacer realidad este sueño de celebrarle a Cecilia su cumpleaños? Unos Ángeles con uniforme que desde hace unos meses atrás anotaron la fecha de su nacimiento, y justo en el gran día, llegaron sin avisar y decoraron la casa para que Cecilia, cuando llegara de la guardería, encontrara su fiesta.
Torta, pasabocas, decoración, todo tipo de dulces y por supuesto los invitados, sus amiguitos y vecinos que no podían perderse de esta fiesta, hicieron parte de esta gran sorpresa que la Policía de Vecindario de la estación de San Jacinto, le hicieron a la pequeña Cecilia.
Ella amó todo, al llegar de la guardería, se encontró con todo listo, solo le faltaba cambiarse el uniforme y ponerse un vestido rosa color rosa, ese que simboliza la amabilidad, lo positivo, sentimental, sensibilidad, cortesía, buena educación, infancia e inocencia. Su mamá la peinó y le decoró la cabeza con un cintillo rosa muy a la moda; y su sonrisa, fue lo mejor de la celebración.
Y es que para alegrar un corazón tan pequeño como el de Cecilia, que quizás por la falta de recursos de su madre iba a pasar otro cumpleaños sin saber que era celebrarlo, no se necesitaba más que voluntad y ganas, esas que los Policías de San Jacinto tuvieron y que entre ellos recolectaron para hacer de esta fecha inolvidable, para una niña que añoraba celebrar su vida.
Al respecto, el coronel Alejandro Reyes Ramírez, comandante Departamento de Policía Bolívar, dijo «estos acercamientos con la comunidad hace parte de la nueva estrategia del modelo de atención policial orientado a los niños, niñas y adolescentes con el ánimo de llegar a los diferentes barrios, veredas y municipios que hacen parte de la jurisdicción de Bolívar».
