- En 2023, el sector agrícola creció un 1,8% y alcanzó exportaciones por US$766,5 millones; sin embargo, las condiciones económicas y medioambientales han provocado el cierre de 395 empresas en dicho sector.
Colombia se posiciona como un destino estratégico para inversiones en negocios agrícolas, forestales y ganaderos gracias a su amplia experiencia en el sector, un mercado interno robusto y una ubicación geográfica privilegiada para exportaciones. Cesce, compañía aseguradora especializada en los ramos de Crédito tanto Interno como crédito a la exportación, Cumplimiento y RCE, explica las oportunidades y desafíos del sector, resaltando su papel crucial en la economía colombiana y cómo el sector asegurador mantiene la estabilidad y continuidad de productores y empresas dentro de esta extensa cadena productiva.
De acuerdo con los datos de Camacoes (Cámara Oficial de Comercio de España en Colombia), el sector agropecuario colombiano ha sido fundamental para la economía del país. En 2023, creció un 1,8%, y en septiembre del mismo año, las exportaciones de productos agropecuarios alcanzaron los US$766,5 millones FOB (Free on Board), consolidando su relevancia en el mercado internacional. Además, en el último trimestre de 2023, los indicadores económicos del sector crecieron un 6%, convirtiéndolo en el mayor contribuyente al PIB en ese periodo.
A pesar del aumento del 112% en el presupuesto para el agro en 2023 y del 144% en la inversión, las condiciones económicas complejas en el país continúan afectando a las empresas de la cadena productiva. La ganadería, por ejemplo, disminuyó un 0,9% en comparación con el mismo periodo de 2022, debido a una caída del 32,6% en las exportaciones de carne procesada y del 23,5% en las exportaciones de animales en pie.
“En el seguimiento al macro sector de Agricultura, Ganadería y Caza, hemos observado una reducción del 49% en la creación de nuevas empresas durante el primer trimestre de 2024 en comparación con el mismo periodo de 2023, pasando de 1.330 a 672 empresas. Esta disminución se debe principalmente al fenómeno climático de El Niño y las variaciones en el Índice de Precios al Consumidor (IPC), lo que también provocó el cierre de 395 empresas en el sector. Es clave abordar los desafíos que enfrentan estas empresas frente a la incertidumbre económica y acompañarlas en los retos que presenten, para que los superen y aprovechen las nuevas oportunidades que brinda el mercado a nivel global”, comenta Diego Fernando Díaz Méndez, Gerente Técnico de Cesce Colombia.
Algunos puntos que son clave para el desarrollo y la creación de oportunidades en el sector agrícola son:
- Tecnificación: solo el 15% del campo colombiano utiliza tecnología avanzada. Este bajo nivel de tecnificación implica una gran oportunidad para mejorar la productividad mediante la inversión en tecnologías modernas. La adopción de sistemas inteligentes y automatizados puede aumentar significativamente los rendimientos y la eficiencia de los recursos, además de reducir costos operativos y minimizar el impacto ambiental, haciendo el sector más competitivo a nivel global. Para lograrlo, es necesario unir esfuerzos tanto del sector público como del privado para fomentar la adopción de tecnología, así como la capacitación de los campesinos y productores en el uso y aprovechamiento de innovaciones que potencien sus negocios.
- Infraestructura: mejorar la infraestructura es crucial para facilitar el transporte, almacenamiento y exportación de productos agrícolas desde las zonas rurales hasta los mercados nacionales e internacionales. Se requiere una mayor inversión por parte del gobierno para mejorar la infraestructura vial, ferroviaria y portuaria con el objetivo de reducir los costos de transporte, disminuir las pérdidas de alimentos perecederos y mejorar el acceso a servicios básicos para las comunidades. Esto incentivará la producción agrícola y fomentará la inversión en áreas rurales.
- Prácticas sostenibles: la adopción de prácticas agrícolas regenerativas y la reducción del uso de insumos contraproducentes son esenciales para garantizar una producción responsable y mejorar la competitividad internacional. Prácticas como la rotación de cultivos, la conservación del suelo y la agricultura orgánica no solo ayudan a preservar el medio ambiente, sino que también mejoran la salud del suelo y la calidad de los productos agrícolas. La creación de incentivos por parte del gobierno nacional y el acompañamiento para que los agricultores opten por este tipo de prácticas potenciarían la sostenibilidad y, con ella, la competitividad del país frente al mundo.
- Aseguramiento: es fundamental asegurar a las empresas del sector y sus actividades frente a riesgos económicos y medioambientales que puedan afectar la producción, la relación con clientes o proveedores y la liquidez. El seguro de crédito, tanto para el mercado interno como para la exportación, es clave para el sector; proporciona apoyo a las empresas para enfrentar incertidumbres, generar mayor confianza en las actividades de exportación y reducir el riesgo de impagos. Estos seguros son cruciales para la estabilidad financiera y la supervivencia de las empresas del sector.
- Exportación: Camacoes destaca a Colombia por su nivel de exportación, principalmente de café, flores, banano, azúcar, aceite de palma, ganado en pie, carne bovina y cacao, además de su potencial crecimiento con productos como aguacate, tilapia, leche, trucha y panela. Estados Unidos es el mayor destino con el 41,7% de las exportaciones, seguido por Países Bajos y Bélgica. Las regiones destacadas por su actividad agrícola en el país son Antioquia, Huila, Cauca, Tolima y Caldas. Para aprovechar este potencial productivo, es necesario continuar mejorando las facilidades en la adquisición de insumos, los procesos logísticos, los acuerdos comerciales y las capacitaciones legales, de modo que los productores puedan llevar a cabo estas actividades con mayor eficiencia.
“El sector asegurador cumple un rol fundamental en el desarrollo y estabilidad del sector agrícola en Colombia, ya que protege a las empresas de riesgos y asegura la continuidad de la cadena productiva, que abarca la producción, el transporte, la logística, los insumos, la comercialización, el procesamiento e industrialización. La participación de las aseguradoras en este sector impulsa la inversión e innovación en cada etapa del proceso y contribuye a la estabilidad financiera de las empresas agrícolas, permitiéndoles enfrentar desafíos y aprovechar oportunidades de crecimiento a nivel nacional e internacional”, concluye Diego Fernando Díaz Méndez, Gerente Técnico de Cesce Colombia.
