Año tras año Koty, un comerciante del barrio La Magdalena le ofrece a los recicladores de la zona lo que ellos consiuderan el Aguinaldo Navideño, que consiste en un desayuno y la entrega de detalles para que les lleven a sus hijos.
Este año, quiso que fuera diferente y llamó al Grupo de Atención Antiextorsión del GAULA para que juntos con ellos se realizara la labor social, generando ese lazo de unión entre la autoridad y la comunidad.
La respuesta no se hizo esperar y como cuando se atiende un caso de extorsión, fue casi que inmediata; hombres y mujeres del GAULA estuvieron presentes colaborando y unieron esfuerzos para que este año el Aguinaldo Navideño fuera inolvidable.
«Es una labor muy bonita, sabemos que ellos le hacen un bien a la comunidad y al medio ambiente con la labor de reciclaje y nuestros amigos del GAULA le hacen un bien a la ciudadanía y a la seguridad, por eso esta fue la mezcla perfecta, además de sentirnos respaldados, sentimos al Grupo de Atención Antiextorsión como esa mano amiga que siempre está ahí cuando la necesitamos«.
Y es que no solamente el GAULA se compone de operativos que contribuyen a la seguridad, también juegan un papel primordial en cuanto a la labor social que sirve para generar esa confianza afianzar los lazos de comunicación con la comunidad, en especial en estas fechas decembrinas.
El día avanza y se continúa enseñando a la ciudadanía las medidas de autoprotección con todos los comerciantes de los barrios La Magdalena, La Victoria, La Unión y La Alboraya para prevenir el flagelo de la extorsión, pero hoy no será un día cualquiera, hoy quedó plasmado en la mente de comerciantes, recicladores y miembros del GAULA ese mensaje navideño donde sabemos que todos los buenos estamos del mismo lado…
