- El chef colombiano Néstor Mesa rescata la cocina de origen con el indiscutible toque francés que caracteriza la cocina de Sofitel
El restaurante Basilic de Sofitel Bogotá Victoria Regia estrena nueva carta y en ella el encanto de una cocina colombiana de origen con acento francés está presente en cada preparación, una propuesta con mucho gusto y clase que lo transporta a los sabores de las regiones Cundiboyacense, Pacífica y Caribe
Y es ese el propósito del Chef Néstor Mesa rescata la cocina de nuestros antepasados, la riqueza de las especies, de los tubérculos, las frutas y todo los que hace que la cocina colombiana sea variada y versátil en sus sabores sin perder la esencia de Francesa que permite dar ese toque gourmet a cada preparación.
De acuerdo con el Chef Ejecutivo del hotel Sofitel Bogotá Victoria Regia Néstor Mesa “creamos una propuesta gastronómica que añadan valor a la experiencia en el restaurante Basilic, cada preparación de la carta cuenta una historia que viene de nuestros ancestros o de nuestras vivencias cuando éramos más pequeños. Nada es al azar y, por eso, esta carta resulta mostrando lo mejor de nuestras regiones colombianas sin perder el ADN francés”.
Christophe Tessier, director de alimentos y bebidas del hotel Sofitel Bogotá Victoria Regia dice “llegamos hoy a un punto de evolución en el restaurante Basilic. Empezamos a pensar cuáles son las expectativas de nuestros clientes y el resultado es una carta versátil, moderna que cumple las tendencias y la esencia de nuestra gastronomía Sofitel, sin perder la identidad colombiana”.
“A esto se suma un espacio recién renovado que juega con diferentes ambientes tanto al interior como al exterior del hotel que, de forma orgánica, crean una atmósfera más especial que invita a disfrutar de esta nueva propuesta gastronómica”, concluye Tessier.
Propuesta de Lujo
La propuesta gastronómica del restaurante Basilic mezcla creativamente productos locales de calidad y sabores ancestrales colombianos con los toques y técnicas francesas que permitirán descubrir recetas únicas y diferentes. Así, el Fortín de cangrejo, que se encuentra en las Entradas se sirve con mousse de aguacate y culis de mango dulce, cortado de corozo y papel de arracacha o una Sopa de Ahuyama con crostini de pan micro Green y tubérculos andinos y no se puede dejar de lado el Pulpo grille con marranitas colombianas, aderezado con salsa romesco finalizado con aguacate local asado.
En los fuertes se destaca el Entrecotencon aromas de carbón acompañados de puré de criolla al estilo carbonará, ensaladilla de palmitos, coles tomatines terminada con bernesa de tomillo; la Corvina acompañada de cebollas ocañeras caramelizadas, champiñón y papa richi aderezada con beurre blanc de puerro o el Pollo orgánico con greda de maíz, aderezado con mojo de frutos secos y arándanos guarnecidos con vegetales campesinos y finalizada con salsa de lulada.
Para finalizar los imperdibles y para ello, el chef pastelero Alejandro Gutiérrez puso todo su ingenio y creatividad para hacer una exquisita propuesta de postres. Se resalta El Matrimonio, un clásico colombiano con producto local, enfocado en los sabores tradicionales de la mora, el arequipe y el queso fresco llevados a la modernidad por medio de diferentes técnicas y presentaciones.
Otra delicia es el sabor de las tradicionales madeleines se apodera de este postre moderno, donde encontramos la avellana en su máxima expresión y un fino baño de chocolate blanco para terminar, acompañado de helado de vainilla o también el Millefeuille, la reinterpretación de nuestro chef pastelero de un clásico francés que no podemos olvidar, la milhoja se presenta de forma moderna con los sabores tradicionales acompañada de frutas frescas de la sabana.
Un espacio con encanto
El restaurante bar Basilic hizo parte de la remodelación que finalizó recientemente en el hotel Sofitel Bogotá Victoria Regia y su diseño se suma al concepto del hotel que busca resaltar la sofisticación francesa y la cultura colombiana a través de su biodiversidad y su riqueza natural.
Es así, como el color verde toma especial relevancia, haciendo alusión tanto a las esmeraldas reconocidas por su belleza, como a la planicie y montañas que rodean a Bogotá. También está presente el color azul, que recuerda que la capital posee la mayor cantidad de paramos del país y la diversidad de aves que se halla en el territorio nacional.
La terraza exterior y la nueva opción al aire libre fuera del restaurante simbolizan esa esencia y ese espíritu que se vive en las calles de París y que permite disfrutar de una tarde fresca en Bogotá con buena comida y una especial selección de bebidas y cócteles.