La salud es un aspecto fundamental en nuestra vida diaria y una parte crucial de mantenernos sanos es asegurarnos de que los alimentos que consumimos estén libres de enfermedades y sean seguros para el consumo.
Las Enfermedades Transmitidas por Alimentos (ETA) se definen como el síndrome originado por la ingestión de comida y/o agua que contiene agentes etiológicos que afectan la salud de las personas que los consumen y pueden ser causadas por bacterias, virus, parásitos u otros organismos.
Entre las afecciones más comunes se encuentran la fiebre tifoidea, la disentería, la poliomielitis, la meningitis, la salmonelosis, la Escherichia coli, la Trichinella spirallis y la Hepatitis A. Tenga en cuenta que estas molestias pueden presentarse con gran variedad de síntomas como fiebre, náuseas, vómito, diarrea y dolor abdominal, además, posibles complicaciones severas como sepsis y otros síndromes asociados.
Ahora bien, cuando se afectan dos o más personas por el mismo incidente se define como un brote de ETA, en este caso es necesario corroborar que las personas afectadas hayan consumido el mismo alimento y presenten síntomas semejantes, los brotes pueden ocurrir en hogares, restaurantes, establecimientos de comida rápida y otros lugares donde se preparan y consumen alimentos.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, las ETA constituyen uno de los problemas sanitarios más comunes que aquejan la salud de las personas en el mundo, y afectan con mayor severidad a niños, mujeres embarazadas, ancianos y personas con otros padecimientos.
Es de importancia resaltar que, según el Instituto Nacional de Salud, se ha observado un incremento significativo en el número de personas afectadas por las ETA en todo el territorio colombiano. Los reportes indican un aumento de aproximadamente un 30% en comparación con el mismo período del año anterior.
Es por esto que, desde el área de Promoción y Prevención de NUEVA EPS brindamos algunas recomendaciones para prevenir las ETA:
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Lave las manos adecuadamente con agua y jabón antes de manipular alimentos y después de usar el baño. Esto es especialmente importante para evitar la propagación de bacterias y virus.
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Asegúrese de que los alimentos estén bien cocidos, especialmente carnes y huevos. Evite la contaminación cruzada, manteniendo los alimentos crudos separados de los cocidos y utilizando tablas de cortar y utensilios diferentes.
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Guarde los alimentos en temperaturas seguras, ya sea en el refrigerador o en el congelador, para prevenir el crecimiento de bacterias. No deje los alimentos perecederos a temperatura ambiente por un tiempo prolongado.
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Si no está seguro de la calidad del agua, hierva o desinfecte el agua antes de consumirla. puede tomar agua embotellada segura.
Al trabajar juntos, podemos proteger nuestra salud y reducir la incidencia de las intoxicaciones alimentarias. Recuerde que la prevención está al alcance de todos, y al tomar medidas simples pero efectivas, podemos disfrutar de alimentos seguros y contribuir a una mejor calidad de vida.
