- Ante la indolencia de quienes abandonan a estos animales, los uniformados crearon esta estrategia para brindarles comida diaria a estos felinos.
Hace muchos años, en el antiguo Egipto, los gatos eran considerados unos Dioses, eran venerados por los egipcios por ser felinos que venían de la misma familia que el León. Su fuerza, sigilosos, inteligencia y velocidad, despertaron ciertas pasiones hasta el punto de llegar a pensar qué, los gatos, eran la reencarnación de Bastet, una Diosa que representaba amor, belleza y protección.
Y sí, estas otras características se suman a estos felinos, pero en la actualidad, la realidad es otra. Han sido millones los casos de abandono animal que se conocen, y al mismo tiempo, el mismo número de almas caritativas alzando la voz de aquellos que no la tienen.
En esta oportunidad, en la ciudad de ensueño, Mompox, en el departamento de Bolívar, los Policías de la estación le hicieron frente a una situación que se había vuelto cotidiana para muchas personas, pero inaceptable para ellos.
Se trataba del abandono de más de 150 gaticos en el Cementerio principal de este Distrito. Un escenario inadecuado para vivir, pero que, a la fuerza, seres sintientes tuvieron que convertir en su hogar, pues sus dueños, decidieron sacarlos de sus casas.
El llanto que proviene de este lugar, no es más que un sonido agónico de miedo, de desprotección, de dolor, pues, aunque no puedan decirlo, estos gaticos sienten y de seguro, tratan de acostumbrarse a la ausencia de quienes alguna vez fueron su familia.
Sin tener otro refugio adonde trasladarlos, había que mitigar otra necesidad, su alimentación.
Fue así como los uniformados pusieron en marcha una estrategia para que a estos animalitos no les falte comida, pero, sobre todo, protegerla de la lluvia y de la humedad que rodea este frio lugar.
Es la instalación de unos tubos en PVC ubicados en partes estratégicas del cementerio, el cual se llenan de comida para gatos y va bajando a medida que la vayan consumiendo. Una idea que se ha creado en diferentes partes del mundo, con el fin de solventar esta primera necesidad de todos aquellos animales de la calle. Al igual que las vasijas de agua, que deben ser llenadas a cada momento.
Hoy, con la satisfacción de haber sido parte de esta iniciativa, queda el sin sabor de ver como las personas son capaces de sacar de sus casas y botar a un animal, quitándole la oportunidad de tener un refugio, un hogar, una familia. Porque sí, en eso nos convertimos para ellos, su familia.
Ahora, los uniformados de esta estación ya están pensando en la segunda fase, una jornada de esterilización por el bienestar de ellos, así, se evita que siga creciendo el número de gaticos en estas condiciones.
Por lo que extienden una invitación a la comunidad en general, a que apoyen esta causa, donando concentrado para estos gaticos y así se le garantice su comida diaria.